El solar angosto, situado en el interior del centro histórico de Málaga, se soluciona con una lógica propia del lugar. Se accede mediante un pasadizo semi-público a un espacio abierto comunitario, y todas las viviendas se desarrollan alrededor de dos patios o fachadas, como mínimo, teniendo siempre doble ventilación y doble iluminación.